La autenticidad de esta unidad queda ratificada en la pequeña placa situada en la parte posterior de la columna que verifica ser una “Ritter UNIT”, manufacturada por Ritter A.G. en Alemania (ca. 1920-1930). La estructura es metálica y está pintada en negro. Además de un sillón anatómico tapizado en cuero, con sus brazos, su reposacabezas, y su reposapiés de plataforma que permite variaciones en su postura según lo pida la propia configuración del paciente mediante los tres pedales que bajo el mismo accionan el mecanismo hidráulico que le dota de movimiento de ascenso y descenso, nos encontramos con casi todo lo necesario para poder ejercer lo que de Arte dental se había transformado en Odontología a comienzos del siglo XX.

La columna, a modo de árbol, consta de tres ramas o brazos principales. El más alto es el central y brota en la parte posterior. Culmina con una lámpara de cuatro globos que pretende evitar sombras en el interior de la cavidad bucal. Éstos pueden ser encendidos alternativamente mediante un interruptor de rosca ubicado en la parte inferior y central de los mismos, permitiendo trabajar así con una o más luces a la vez.

De la columna, con interruptor de encendido y apagado, salen asimismo otros dos brazos gruesos. El derecho (a la izquierda del paciente) se bifurca en dos dispositivos que terminan en una escupidera redonda de opalina y en un reposavasos del mismo material, ambos dotados con grifos para cumplir su llenado. En el izquierdo (a la derecha del paciente y a la mano del dentista) un brazo similar sustenta un aro circular radiado en el que reposa la bandeja auxiliar, también fabricada en opalina, y a su lado surge un pequeño mechero de gas con forma de cazoleta, para derretir la cera y poder usarla en la prueba y modelado de dentaduras. También surge de este brazo un torno articulado de poleas, con cabeza esférica, que permite accionar la pieza rotatoria en la que se acoplarán las diferentes fresas destinadas al corte de las estructuras dentales e incluso óseas. Asimismo, una jeringa de aire y agua reposa en la parte derecha de la columna, con su manguera de caucho forrada de hilo negro.

Un compresor, con su campana de cristal, proveerá de energía necesaria a los instrumentos rotatorios, los cuales se accionan merced del dispositivo de pedal que se conecta a  través de un cable a la base de la columna. 

Por último, un taburete del mismo color que el equipo, tapizado en cuero, permite al operador disfrutar de una posición más ergonómica para la realización de trabajos que requieren más tiempo.

Desde este momento, los equipos dentales no iban a tener transformaciones sustanciales. Nuevos diseños, materiales y mecanismos vienen no a variar sino a perfeccionar este sistema de equipo o unidad dental que en lo básico se mantiene en la actualidad en la inmensa mayoría de las clínicas dentales.