Gaceta de Actualidad Enero/Febrero de 2022

Museo de Medicina Infanta Margarita

Museo de Medicina Infanta Margarita

Nº 66 - 22 de abril del 2022

Real Academia Nacional de Medicina de España

BIENVENIDA

Excmo. Sr. D. Antonio Campos Muñoz
Director académico del Museo

COMISIÓN DEL MUSEO DE MEDICINA INFANTA MARGARITA

Excmos. Sres. Académicos de Número

D. F. Javier Sanz Serrulla (Sección I)
D. Luis Pablo Rodríguez Rodríguez (Sección II)
D. Miguel Lucas Tomás (Sección III)
D. Jorge Alvar Ezquerra (Sección IV)

Ilmos. Sres. Académicos Correspondientes

D. Francisco Vázquez de Quevedo
D. Eliseo Carrascal Marino

 

UNIDAD TÉCNICA

Excmo. Sr. D. Javier Sanz Serrulla
Director Técnico
D.ª Celia Rodríguez Varela
Catalogación
Dª Cristina Bailón Aneas
Fotografía

La difícil definición de “museo”.

Definir es tarea difícil, incluso las definiciones no sólo evolucionan, sino que cambian. Todavía sigue en vigor la definición de “museo” dada por el ICOM (Consejo Internacional de Museos) hace quince años. Así decía: “Un museo es una institución sin ánimo de lucro, permanente, al servicio de la sociedad y de su desarrollo, abierta al público, que adquiere, conserva, investiga, comunica y expone el patrimonio material e inmaterial de la humanidad y su medio ambiente con fines de educación, estudio y recreo”. En efecto, data de 2007 y es una definición que podríamos llamar de carácter “genérico” a la que tuvieran que tender a converger los museos todos, con sus peculiares características, ámbitos y señas de identidad.

Si esta definición pareciera insuficiente, pues tantas variedades de museos hay, al menos en su contenido, como ideas de sus promotores, vino a elevarla la propuesta en 2019 por un comité que aseguró haber recogido la sensibilidad de sus miembros en todo el mundo y la sometió a consulta en la asamblea del ICOM en Kioto: “Los museos son espacios democratizadores, inclusivos y polifónicos para el diálogo crítico sobre los pasados y los futuros. Reconociendo y abordando los conflictos y desafíos del presente, conservan artefactos y especímenes para la sociedad, salvaguardando la memoria diversa para las generaciones futuras y garantizando la igualdad de derechos y el acceso al patrimonio para todas las personas. Los museos no tienen fines de lucro. Son participativos y transparentes, y trabajan en asociación activa con y para diversas comunidades para recopilar, preservar, investigar, interpretar, exhibir y mejorar la comprensión del mundo, con el objetivo de contribuir a la dignidad humana y la justicia social, a la igualdad global y el bienestar planetario”. Ni que decir tiene que esta “definición”, para mí más bien “alegato”, incumple no ya las clásicas reglas de toda definición, sino que olvida el origen, la evolución e incluso la actualidad de los museos. Tal desacierto supuso la dimisión del comité que la elaboró y parece fácil colegir que por el sesgo político que había tomado con tan poco fundamento al insertar la ideología en la museología con tan poco disimulo. Algo no muy lejano parece vivirse en la actualidad en alguno de los más representativos museos españoles, tal es el caso del MNCARS.

El Diccionario de la Lengua Española aporta cuatro acepciones bastante sensatas que no solucionan el problema, acaso porque tampoco está entre sus fines proporcionar soluciones, sino dejar constancia del significado de las palabras, aunque en no pocas ocasiones lo segundo es consecuencia de lo primero. Son las siguientes:

1.Lugar en que se conservan y exponen colecciones de objetos artísticos, científicos, etc.
2. Institución, sin fines de lucro, cuya finalidad consiste en la adquisición, conservación, estudio y exposición al público de objetos de interés cultural.
3. Lugar donde se exhiben objetos o curiosidades que pueden atraer el interés del público, con fines turísticos.
4. Edificio o lugar destinado al estudio de las ciencias, letras humanas y artes liberales.

Bien hilvanadas las cuatro acepciones se podría aportar una muy digna definición a la que convendría añadir en cada caso la especificidad de cada museo en particular:

Sería, pues la “Institución, sin fines de lucro, destinada al estudio de las ciencias, letras humanas y artes liberales cuya finalidad consiste en la adquisición, conservación, estudio y exposición al público de objetos de interés cultural (artísticos, científicos, etc.) que pueden atraer en su edificio el interés de aquél, incluso con fines turísticos”.

Esta propuesta, desideologizada, o sea, de retorno al espíritu “clásico” de los museos reúne algunas de las características básicas e imprescindibles. Se lee en sus líneas, pero también entre sus líneas y, así, no se mencionan dimensiones ni contenido específico ni dependencia, por ejemplo. Creemos que se debe apuntar a una definición concentrada global de estas instituciones culturales al servicio de la sociedad, en la cual conste la entrada a la particularidad en la que se puedan reconocer cada uno de los museos.

Una definición es nada más, pero también nada menos, que eso, un lugar consensuado de referencia que tiende a la exactitud. No valen reivindicaciones de otra índole, tampoco florituras, pues ambas tienen su lugar, y no es éste. Pero el ICOM debería actualizar o perfilar la de 2007 y convertirla en la referencia por la que conviene guiarse de un modo general que no hay que perder de vista.

Dr. Javier Sanz
Director técnico del MMIM

Pieza del mes.

Balanza para bebés.

El MMIM ha adquirido recientemente una pieza de alto valor museístico, en la especialidad de Pediatría. Se trata de una báscula para pesar bebés fabricada artesanalmente por la casa BALLARÍN, en hierro, y dotada con un juego de pesas acopladas telescópicamente, si bien la medida usada es la libra. Presenta la peculiaridad de que el bebé queda sentado cómodamente durante el proceso del pesaje, y no como en la mayoría de los casos, en los que hay que tumbarlo. La báscula es desmontable y se remata con algunos adornos dorados en las esquinas en que queda encajada la silla. Procede de Santander y perteneció al médico Eduardo Estrañi Campo y, después, a su hijo, Rafael Estrañi.

      


Madrid, museo de la Medicina.

Suele pasar desapercibida, acaso por su brevedad temporal, la estancia de Juan Negrín en la calle de Ferraz, 55, esquina a la de Altamirano, durante los años de 1934 a 1936, en este flamante edificio donde tuvo su laboratorio.

Juan Negrín (1852-1956), es conocido para el gran público como político antes que como científico, no en vano fue presidente de Gobierno entre 1937 y 1939, en fechas trágicas de la reciente historia de España. Sin embargo, dirigió un Laboratorio de Fisiología en la Residencia de Estudiantes, bajo el ánimo de Ramón y Cajal, y obtuvo la cátedra de esta materia en la Universidad Central, pero su gran implicación política dejó oscurecida para gran parte de la sociedad de generaciones posteriores su faceta como fisiólogo, siendo considerado el puente entre los premios Nobel españoles, Cajal y Ochoa.


Noticias.

Exposición sobre Santiago Ramón y Cajal en el Museo de Ciencias Naturales.

Durante todo el año de 2022 podrá visitarse en el Museo Nacional de Ciencias Naturales la exposición “Santiago Ramón y Cajal” pues con buen criterio ha sido ampliado el plazo dada la circunstancia de ser este “Año de Investigación Ramón y Cajal”.

En una extensión suficiente se divide y organiza el mensaje en varios apartados sobre la vida y la obra del sabio, tales como el humanista, el artista, el fotógrafo, el científico, la escuela cajaliana, etc., en la que se explica al visitante el periplo del personaje a través de los numerosos objetos relacionados con sus investigaciones, pero también de sus premios y entre los más preciados se pueden contemplar el diploma y la medalla del Premio Nobel o la medalla del Premio Von Helmholtz. Incluso algunos de los dibujos del Sistema Nervioso o pinturas anatómicas, firmados por Cajal,a son asimismo mostradas en este homenaje.

Todos los objetos expuestos pertenecen al Legado Cajal, depositado en el Instituto Cajal-C.S.I.C., institución que custodia buena parte de la producción del gran neurocientífico, pero también objetos personales de su vida diaria y de su vida investigadora y laboral en los que dejó la huella de su dedicación.

Libro sobre Auzoux y sus modelos.

La Universidad Complutense de Madrid, en colaboración con la Faculté des Sciences et Technologies de l’Université de Lille ha editado un espléndido libro titulado “Los increíbles modelos del Dr. Auzoux”, en versión española y francesa. Son catorce los autores de ambas nacionalidades que colaboran en el mismo para analizar la obra y el legado del célebre anatomista francés Louis T. J. Auzoux (1797-1880), devenido en empresario fabricante de modelos anatómicos, humanos y de animales, y aun de vegetales, sus “modelos clásticos”, que acabaron por convertirse en piezas de primer orden en el mundo museístico.

España cuenta con algunos de estos preciados ejemplares, por ejemplo, en Madrid, en la Facultad de Veterinaria de la UCM y también los atesora el Instituto de Enseñanza Secundaria de San Isidro, donde pueden admirarse. Tener “un Auzoux” en el inventario de cualquier museo es un signo de calidad y de distinción de la propia institución, y algunos de estos modelos lucen como en sus mejores días gracias a las exquisitas técnicas de restauración que predominan hoy en día en el mundo de la restauración.